03 Oct LA PURA Y LIMPIA RECIBIÓ A LA PAZ CON EL POSTIGO ENGALANADO
El sábado fue un día grande para la Iglesia de Sevilla. María Santísima de la Paz era coronada canónicamente por el Sr. Arzobispo, respondiendo así a un anhelo de su Hermandad y del barrio del Porvenir, que vivió uno de los días mas plenos de sus más de 75 años de historia.
La Pura y Limpia quiso estar a la altura de tan hermoso día y poner su granito de arena en la multitudinaria procesión que llevaría a la Virgen de la Paz hasta su sede canónica, engalanando el recorrido de la Corporación del Porvenir a su paso por nuestra Capilla del Postigo del Aceite.
La Priostía se afanó en preparar este bonito momento, por lo que dispuso un extraordinario altar para nuestra Sagrada Titular y colgaduras en el Arco del Postigo, gracias a la inestimable colaboración de NHD. Fernando Casas, quien nos dió acceso a tan reconocido monumento de Sevilla. Unos trabajos que sin duda, no pasaron inadvertidos para los centenares de viandantes que diariamente cruzan esta antigua puerta de Sevilla y que siempre tienen una mirada para la Pura y Limpia Concepción.
Como si fuera un Domingo de Ramos, la Hermandad de la Paz se acercaba con sorprendente puntualidad, incluso algunos minutos adelantados al horario oficial, a un Postigo del Aceite excesivamente acotado por la policía, dentro del plan estratégico de seguridad que se había dispuesto para la ocasión.
El palio blanco de Sevilla, envuelto en un ascua de luz, llegó hasta la puerta de la Capilla. Frente a frente, la Hermandad de la Pura y Limpia Coronada ofrendó con un ramo a La Paz y nuestro Hermano Mayor, con la venia del Rvdo. P. Don Isacio Siguero Párroco de San Sebastián, inició la oración inmaculista que reza en la puerta de nuestra Capilla. «Bendita sea tu Pureza».
Ernesto Sanguino llamó al paso y en una «levantá» a pulso memorable, La Virgen de la Paz abandonó definitivamente el Barrio del Arenal a sones de la flauta de la marcha «Rocío», camino del barrio que la vió nacer y que esperaba despierto tan esperada llegada.
Una noche mágica con aroma a Domingo de Ramos, que nos deja el reconocimiento de Sevilla a la devoción del barrio del Porvenir y en la que la Hermandad de la Pura y Limpia ha querido ser partícipe, dentro de sus humildes posibilidades, desde el cariño a la Hermandad de la Paz y la responsabilidad como Iglesia de Sevilla ante un día de fiesta tan señalado en nuestra Archidiócesis.
Que la pureza de María nos colme de paz.
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